Esta viñeta, es un claro ejemplo, de cómo en la escuela, cortan la imaginación de los pequeños. La maestra les pide que se traigan pinzas para hacerle un regalo a su padre, pero resulta, que el regalo que le tienen que hacer es un portaplumas, no vale hacer otra cosa.
Los niños, a estas edades, tiene una imaginación y una creatividad enorme, solamente hay que saber fomentarla. Los niños, se sentirán dentro del aprendizaje y con ganas de hacer la actividad plástica, ya que la hacen a su modo, utilizando el material que se les indica, pero haciéndola suya.
A la maestra solo le importa el resultado, y se deja atrás la parte más importante que es el proceso, la manera en que cada niño lo realiza, como lo realiza, que utiliza para hacerlo…
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